domingo, 20 de enero de 2013

14 de enero de 2013. Año nuevo...

Comenzado el año 2013, retomamos el taller donde lo dejamos. 
Durante la clase del día 4 de enero avancé un poco. No mucho, porque hubo Roscón "pre-Reyes" y celebración sorpresa, la cual me hizo sentir mucha vergüenza, aunque me encantó. ¡Gracias a todas!
Aquí va el "Antes-Después" de ese día:
Antes
Después: Detalle al finalizar la clase del 4 de enero.
 Los avances, si os fijáis, están en la manga izquierda (su izquierda) que quedó terminada, y detalles en el hombro y manga derechas (su derecha), que quedó casi terminada.
Pero quizá os preguntaréis: ¿Qué es esa especie de "oreja de animal" que asoma en la manga derecha? ¿Y esos 2 "fideos" en el hombro?
Los "fideos" son más fáciles de adivinar. Es pelo de una de las chicas, cuya cabeza asoma por la izquierda. Los marqué como referencia y de momento quedarán ahí. 

La "oreja" ya es más difícil de comprender porque, como es obvio, no es la oreja de la chica (entonces no sería una chica, sino una ternerilla). Bien, se trata de un atisbo del cuello del abrigo que llevaba, pero como bien me dijo E., no se va a entender bien y no aporta nada, así que va a desaparecer en cuanto se seque (es lo bueno de que nadie vea el original, jejeje)

El lunes, 7 no hubo taller. Era el día después de Reyes y último día de vacaciones de las niñas (y mío), así que lo dejamos para el día 14.

Y el lunes 14 de enero me presenté en el taller, pero no con la mejor de las disposiciones para pintar. Un mal día lo tiene cualquiera. Menos mal que en el taller se me curan todos los males, aunque ese día tardé bastante en "entrar" en el cuadro. Ese día no vino Lunita porque estaba liada "apagando incendios"(*). Cuando no viene la echamos de menos. Sin embargo, ¡sí que vino R.! Me doy cuenta de que creo no haber hablado antes de R. Es un nuevo compañero pero falta a menudo, el pobre tiene bastantes incendios que apagar(*). Por eso su presencia fue más apreciada, si cabe.

Bien, al grano. Objetivos del día: Terminar la manga derecha y comenzar con el pelo (¡atención!)

El primero de los 2 objetivos los cubrí relativamente pronto: Borrar la "oreja" y pintar una manga inventada. Bueno, no fue tan difícil.
El segundo de los objetivos ya es bien distinto. Nueva gama de colores. Abandono los rosáceos y violetas, y voy hacia los marrones.

INCISO: Odio la palabra "marrón" por las muchas connotaciones que tiene, tanto como "problema" (Comerse un marrón) como por "sucio"( la mierda es marrón, con perdón).
Me gusta mucho más la palabra "castaño", que según la R.A.E. es sinónima y, sobre todo, la definición que viene en Wikipedia:
"En general, se llama marrónpardocastañocanelocafécarmelita o chocolate a los colores rojos a amarillo anaranjados, oscuros y poco saturados, semejantes a la coloración más característica de la madera, de la tierra o del pelaje del oso pardo"
Mola, ¿eh?

Bueno, sin más os muestro el fruto de mi trabajito de este día:
Estado del cuadro el día 14 de enero de 2013
¿Cómo lo veis?
Manga terminada, cabeza iniciada.
La verdad es que viendo la fotografía, no está mal, aunque lo cierto es que el pelo no me quedó bien, tendré que retocarlo (o quien sabe, quizá repetirlo) Ahora es difícil de explicar porqué, pero lo haré. Cuando termine la clase del próximo día, el 21.


El aprendiz

(*) "Apagar incendios": Dícese cuando alguien no puede asistir al taller porque le ha surgido un marrón en el trabajo, o tiene demasiado trabajo.  




4 comentarios:

  1. Interesante como ya la camisa tiene forma con la técnica. De verdad que ha de ser todo un trabajo.
    De este lado del océano, y propiamente en este pedacito de tierra, solemos llamarle café al marrón y cuando se trata de cabello lo llamamos castaño (solo para un pequeño intercambio).

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    1. Color "café"... Muy bonito y MUCHO MEJOR que marrón.

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  2. Abandonados nos tienes a tus fieles seguidores...

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  3. No puede ser... tienes razón. ¡LO SIENTO! Ahora mismo me pongo a la faena.
    Pero luego no te quejes si muestro el trabajo de alguien.
    Gracias por empujarme a seguir.

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